Huacachina, un oasis rebelde Debo confesar que mi querida ICA ya no es la de antes, ahora es más ruidosa, más comercial hasta un poquito más movida, pero aún conserva ese calor que uno busca al escapar de la gris Lima, las buenas chocotejas, el buen pisco y mi adicción por las insaciables galletitas “paciencia”……